Diego Valdez, un vendedor de sándwiches y empanadas de Posadas, Misiones, encontró un bolso con $4 millones en el estacionamiento de un supermercado. A pesar de sus necesidades económicas, decidió devolver el bolso a su dueño, un médico.

Valdez, padre de dos hijos, trabajaba en un restaurante que cerró en noviembre y ahora se dedica a vender comida en la calle. A pesar de sus dificultades económicas, aseguró que «no merezco quedarme con algo que no es mío».
El dueño del bolso, un médico, se sintió agradecido y le ofreció una recompensa, que Valdez solo aceptó porque el médico insistió. La historia de Valdez se difundió en los medios locales y recibió mensajes de apoyo y felicitaciones. Fuente Prensa 7 Paraguay