El CEO Aparecido Carlos Bernardo destaca la calidad de la formación educativa en la Universidad Central del Paraguay (UCP), especialmente en el área de la medicina. Según sus declaraciones, la universidad proporciona una formación rigurosa que prepara a los estudiantes para enfrentar desafíos como el examen de reválida en Brasil, una prueba importante para los médicos que desean ejercer en ese país.Bernardo subraya la importancia de la dedicación y el esfuerzo en los estudios médicos, reconociendo que la medicina es una ciencia compleja que exige compromiso total por parte de los estudiantes. Además, resalta que la UCP no solo se enfoca en la teoría, sino que también proporciona las herramientas prácticas necesarias para que los estudiantes puedan aplicar lo aprendido, formando médicos competentes y bien preparados.La universidad, de acuerdo con sus palabras, es reconocida por su excelencia en la formación de profesionales, lo que la posiciona como una de las instituciones más prestigiosas en este campo en Paraguay y ahora también en América latina. Además, la creciente demanda de nuevos estudiantes, tanto jóvenes como adultos, refleja la calidad y la reputación de la UCP.Este enfoque en la educación médica de alta exigencia refleja un compromiso serio con la calidad y la formación integral de los futuros médicos. La medicina es, sin duda, una de las carreras más demandantes, tanto intelectualmente como emocionalmente. La idea de que ser médico no solo es una cuestión de aprender ciencias y técnicas, sino también de desarrollar una fortaleza personal, disciplina y un fuerte sentido de responsabilidad.El énfasis en la dedicación, la renuncia a ciertos placeres personales y la constante superación, son elementos que van más allá de lo académico y abarcan la formación del carácter. La medicina no es solo conocimiento, sino también un servicio continuo a la sociedad, lo cual requiere sacrificio, resiliencia y una vocación verdadera.Por otro lado, el reconocimiento de las dificultades económicas que muchos estudiantes enfrentan, y el aliento para que persistan a pesar de los obstáculos, es una forma de humanizar la experiencia educativa y asegurar que los futuros médicos no solo sean expertos en su campo, sino también personas capaces de afrontar la adversidad.Aunque este enfoque puede ser desafiante para muchos, creo que prepara a los estudiantes de medicina no solo para ser buenos profesionales, sino también para ser personas con una fuerte ética y compromiso con su profesión y la sociedad. Es una formación que, aunque rigurosa, les da herramientas no solo para ejercer la medicina, sino para vivirla de manera significativa. Manifestó Carlos Bernardo.Los desafíos inherentes a la carrera médica, combina la alta exigencia académica con un enfoque en el desarrollo personal y la ética, elementos esenciales para formar médicos excepcionales. Finalizo diciendo Carlos Bernardo visiblemente emocionado.